miércoles, 6 de noviembre de 2013

Pensando...pensando...

¡Hola!
Soy Ana y esta semana me ha tocado reflexionar un poquito sobre la superficialidad del conocimiento.

En primer lugar debo definiros la superficialidad del conocimiento como la pérdida de la esencia de la comprensión, ya que solo se realiza un barrido de la forma del texto sin detenerse a comprender lo que afirma.

Con la aparición de las nuevas tecnologías, tanto profesores como alumnos se han acostumbrado a tenerlo todo con tan sólo apretar un botón.  ¿Qué pasaría si de repente desaparecieran las TIC? ¿Seriamos capaces de conseguir información por otro medio acostumbrados a las facilidades de las TIC?

Vivimos en una sociedad en la que se hace imprescindible el uso de ordenadores, teléfonos, Internet…  una sociedad en la que la solución de nuestros problemas se encuentra en las nuevas tecnologías y mientras esto sea así, nuestra capacidad crítica disminuirá.

Tenemos un verdadero problema si cada vez que nos dan facilidades para llegar a un conocimiento, nos quedamos a mitad del camino.

He reunido una serie de causas que responden  a la problemática de la superficialidad del conocimiento:
  1.   La gran cantidad de información que existe. Al haber tanta información, sobre todo en Internet, hace que tengamos problemas para seleccionarla y nos quedamos solo con una pequeña parte de ello.
  2.  Se realiza una lectura de los titulares. No le da la utilidad que tiene al título, ya que tan solo es una pequeña entrada de información en la que no tienes la información completa sobre la noticia.
  3.  Queremos que nos llegue la información sin realizar esfuerzo alguno, es la “ley del mínimo esfuerzo”. Preferimos antes ver un video, o un breve resumen sobre “algo” que realizar un esfuerzo intelectual que nos lleve al conocimiento. Por esto hay un déficit en la capacidad crítica de las personas. Las pedagogías emergentes pueden solucionar este problema a través de formas de enseñanza que hagan que los alumnos sean los creadores de su propio conocimiento.
  4.   Solo nos detenemos en lo que nos interesa. Esto hace que no tengamos una cultura general, que seamos especialistas en pequeños temas que nos interesan. No somos conscientes de lo que ocurre en la realidad que nos rodea.
  5.  Ahora vende lo que crea controversia, lo trágico, lo provocador, lo que cree un revuelo social, aunque solo sea la punta del iceberg. Solo nos interesan puntualmente las noticias, no nos centramos en conocer lo que de verdad ocurre. Solo quieres conocer lo que ha pasado, los muertos, etc… pero lo ves como un problema de otro mundo. Además en cuanto aparece otra información sobre otra tragedia, se nos olvida directamente la anterior.
  6. La existencia de medios que simplifican algo complejo en algo muy sencillo. Esto provoca que no haya reflexión crítica en un futuro, por lo que tendremos una sociedad atrasada, es decir, avanzamos tecnológicamente pero volvemos atrás respecto a la “libertad crítica”, ya que nos convertiríamos en clones manipulados por aquellos que controlan las tecnologías y la información, es decir, el llamado conocimiento.

Pero  las nuevas tecnologías también traen consigo ventajas para nuestra vida cotidiana como una mayor capacidad para almacenar datos, enviar todo tipo de documentos a otros usuarios, mayor rapidez, facilidad para buscar información, poder comunicarnos entre nosotros a nivel mundial…

PD: Espero que hayáis comprendido lo que significa todo esto y no haber leído por  encima esta reflexión porque si no seréis un claro ejemplo de la superficialidad del conocimiento. Disfrutad cada palabra.



Un saludo.

2 comentarios:

  1. hay reflexión pero me falta ver más reflexión de cómo habéis aprendido en esta tarea

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  2. En futuras reflexiones del pensador incluiremos lo que nos ha aportado la tarea, y en que hemos mejorado gracias a ella. Un saludo.

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